Este Itinerario de 7 días de viaje en Canadá ha sido diseñado por nuestro equipo para maximizar tu tiempo en cada destino, minimizando los desplazamientos largos
Canadá, el segundo país más grande del mundo, es una tierra de vastas extensiones y paisajes impresionantes que ofrecen una diversidad de experiencias únicas. Desde la majestuosidad de las Montañas Rocosas hasta las ciudades costeras y la riqueza cultural de sus regiones francófonas, cada rincón de Canadá presenta una mezcla única de historia, naturaleza y modernidad.
Este itinerario de siete días está diseñado para aquellos que desean explorar lo mejor de Canadá en un tiempo limitado, asegurando que cada jornada esté repleta de aventuras y descubrimientos sin el agotamiento de largos desplazamientos.
Con un enfoque en la accesibilidad y el disfrute, esta guía le llevará a través de las joyas más destacadas del país, permitiéndole sumergirse en su belleza natural y su rica herencia cultural, mientras se minimizan los tiempos de traslado para maximizar el tiempo de exploración.
Día 1: Vancouver, la Joya del Pacífico
Comienza tu itinerario de viaje a Canadá en Vancouver, una ciudad que combina la majestuosidad de la naturaleza con un vibrante entorno urbano. Dedica la mañana a explorar el Parque Stanley. Este espacio verde de 405 hectáreas, ofrece senderos accesibles para caminar y andar en bicicleta. También posee vistas impresionantes del puerto. El Acuario de Vancouver, ubicado dentro del parque, es una parada obligatoria para conocer la fauna marina del Pacífico.
Por la tarde, diríjete a Granville Island, un centro cultural y gastronómico. El mercado público es un festín para los sentidos, con productos frescos, panadería artesanal y delicias culinarias de todo el mundo. No te pierdas las galerías de arte y tiendas de artesanías que exhiben el talento local. Termina el día con una cena en uno de los restaurantes frente al ma. Allí podrás disfrutar de la vista del skyline de la ciudad.
Día 2: Victoria y los Jardines Butchart
Toma un ferry a Victoria, la pintoresca capital de Columbia Británica. Esta travesía te permitirá disfrutar de los paisajes marinos y, con suerte, avistar ballenas. Al llegar, explora el puerto interior y admira el majestuoso Hotel Fairmont Empress. Una visita al Museo Real de Columbia Británica te brindará una comprensión profunda de la historia y cultura de la región.
Por la tarde, visita los Jardines Butchart, un paraíso de horticultura con más de 22 hectáreas de jardines temáticos. Pasea por el jardín japonés, el jardín de rosas y el jardín italiano, cada uno con su encanto único. Regresa a Victoria para cenar en uno de sus acogedores restaurantes antes de volver a Vancouver.
Día 3: Whistler, Aventura y Naturaleza
Parte temprano hacia Whistler, a solo dos horas en coche desde Vancouver. Whistler es una de las estaciones de esquí más famosas del mundo, pero ofrece una amplia gama de actividades al aire libre durante todo el año. Pasea la mañana explorando el pueblo, con sus tiendas y cafeterías acogedoras.
Para los aventureros, una caminata por el Sendero del Valle de Cheakamus ofrece vistas espectaculares de los glaciares y cascadas. Alternativamente, toma el teleférico Peak 2 Peak, que conecta las montañas Whistler y Blackcomb. Allí podrás disfrutar de vistas panorámicas de los Alpes canadienses. Termina el día relajándote en los spas de Whistler o cenando en un restaurante de alta cocina.
Día 4: Parque Nacional Banff
Vuela a Calgary y diríjase al Parque Nacional Banff, a una hora y media en coche desde el aeropuerto. El icónico Lago Louise, con sus aguas turquesas, es una visita obligada. Pasa la mañana explorando los alrededores del lago, ya sea en canoa o caminando por los senderos que ofrecen vistas impresionantes de los glaciares.
Por la tarde, visita el propio pueblo de Banff. El Banff Gondola te llevará a la cima de la Montaña Sulphur, donde podrás disfrutar de vistas panorámicas de las Montañas Rocosas. Relájate en las Aguas Termales de Banff antes de disfrutar de una cena en uno de los restaurantes locales, que ofrecen desde cocina canadiense hasta especialidades internacionales.
Día 5: Jasper y la Carretera de los Campos de Hielo
Viaja a lo largo de la Carretera de los Campos de Hielo, una de las rutas más escénicas del mundo, hasta llegar al Parque Nacional Jasper. Este viaje en coche dura aproximadamente tres horas, con múltiples paradas impresionantes en el camino, como el Glaciar Athabasca.
En Jasper, explora el cañón Maligne y el lago del mismo nombre. Para una experiencia única, considera una excursión nocturna para observar las estrellas, ya que Jasper es reconocido por su cielo oscuro y despejado, ideal para la astronomía.
Día 6: Quebec, Historia y Cultura
Vuela a Quebec y descubre la única ciudad amurallada de América del Norte. El vuelo de Calgary a Quebec dura aproximadamente cuatro horas, permitiendo llegar a tiempo para una tarde de exploración. Comienza en el Viejo Quebec, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Pasea por las estrechas calles adoquinadas, visite la Basílica-Catedral de Notre-Dame de Quebec y explore la Ciudadela.
Por la tarde, diríjete a las Cataratas de Montmorency, más altas que las del Niágara. Regresa a la ciudad para una cena en el barrio Petit-Champlain, conocido por sus encantadores restaurantes y boutiques.
Día 7: Montreal, el Corazón Cultural
Termina tu recorrido en Montreal, a solo tres horas en tren desde Quebec. Comienza con una visita a la Basílica de Notre-Dame, famosa por su impresionante arquitectura gótica y su deslumbrante interior. Pasea por el Viejo Montreal y disfrute de su atmósfera europea.
Por la tarde, explora el Parque del Monte Royal. Este parque está diseñado por el mismo arquitecto que creó Central Park en Nueva York. Desde el mirador, obtendrá una vista panorámica de la ciudad. Termina el día en el Barrio de las Artes. Allí puedes disfrutar de una cena en un bistró local. Si el tiempo lo permite, asiste a un espectáculo en uno de los numerosos teatros.
Este itinerario de viaje a Canadá ha sido diseñado para maximizar tu tiempo en cada destino, minimizando los desplazamientos largos y permitiendo disfrutar plenamente de cada día en Canadá.